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Thursday, June 16, 2005

El segundo de a bordo.












Motiva redactar el siguiente artículo, la información conexa aparecida en http://www.elmundo.es/elmundo/2005/06/13/ciencia/1118676317.html, extractada a su véz de un paper publicado en el journal : Proceedings of the National Academy of Sciences, de USA, según el cual el líder de los gorilas de las montañas africanas de Ruanda (Gorila beringei beringei), comparte la paternidad (leáse, parte del poder) -demostrada vía análisis de ADN-, con el macho segundo en importancia a cambio de favores de protección. Conducta, algo equidistante por cierto de la asumida por los gorilas orientales, en quienes la paternidad siempre recae en un mismo macho. Los analistas de El Mundo, comentan que los resultados "...desvelan un comportamiento social y de convivencia en el seno de los grupos de gorilas salvajes, alejado del que se entiende por familia....".

Interesa el tema, por nuestra cercanía ancestral a gorilas y chimpancés. Como se sabe, con estos últimos nuestras diferencias genéticas apenas rozan el 1,5%. Por esta razón, algunos etólogos de prestigio afirman que ciertos comportamientos, nos vienen de atrás, cargamos con ellos y algunos, hasta serían heredables (la capacidad para articular con facilidad, un lenguaje, por ejemplo). Estos posibles nexos, nos han impelido a escrutar el tema de las relaciones de poder entre el macho primero (jefe,boss, capo) y el macho segundo (lugarteniente, secretario, ministro,etc), de a bordo, en seres humanos. Para no alejarnos del tema, pereferimos analizar grupos pertenecientes a las fuerzas oscuras.

Aquí, el modelo de la mafia italiana en USA, http://www.murderinc.com/fam/maranz.html, se adecúa porque las tragedias acaecidas entre jefes y segundos (por razones obvias), eran elemento cotidiano. Masseria y Maranzano (bosses), serían asesinados por segundos ambiciosos e inconformes, por no haber reparado los primeros en las reglas, peligrosidad e importancia de estas relaciones. En el Cap. XXII, en : "...de los secretarios que los príncipes tienen a su servicio...", Maquiavelo, recomienda al príncipe, el modo de preveer si su ministro le sería fiel o, nó. El secreto consistía en ver si el ministro se preocupaba más de sí mismo, que en servirle a él. Agregaba que era crucial para el principe saber elegirlos, en tanto de ello dependían aspectos vitales del poder y/o gobierno.

En el Perú, no menos importante fué la relación : Montesinos-Fujimori http://www.perubookstore.com/cgi-bin/perubookstore. Durante algunos años la influencia y poder de Montesinos llegó a superar a la del boss. Montesinos gobernaba en la sombra. Al igual que Beria en Rusia o, Hoover en USA, el ser el único segundo, le permitía a Montesinos chantajear a Fujimori, bajo la amenaza de exhibir públicamente ciertos documentos que certificaban la verdadera nacionalidad (japonesa), de Fujimori. Este es el riesgo de jefes y segundos únicos, muy parecido al de los gorilas orientales. En este caso Maquiavelo le hubiese aconsejado a Fujimori tener 02, ministros con poderes equivalentes, en lugar de uno. Su famosa frase "divide y vencerás", era aplicable aquí. Al existir 02, las luchas se desarrollarían entre ellos y nó, entre el boss y el único segundo.

El modelo de los gorilas orientales, como se vé tiene muchos riesgos y solo puede ser posible bajo 02 circunstancias. 1- teniendo secretarios altamente satisfechos (otorgándoles prebendas enormes o, como en el caso de los gorilas africanos, haciéndoles partícipes de la paternidad, no sin cierto perjuicio para el boss) y 2 -poseyendo demasiado poder o, siendo tan cruel, al punto de anular por temor, cualquier intento de rebelión.

Quizás por estas razones, Luciano sobreviviente de las guerras intestinas de la mafia, no aceptó ser el nuevo boss. El genio del mal, no quiso correr riesgos. Efectivizó mas bién un astuto movimiento que le valdria adquirir el mote de suertudo ("Lucky"). Luciano, decidió gobernar bajo cubierta, instalando un gobierno colegiado denominado La Comisión.

Que las grandes empresas internacionales no escapan a estas relaciones o luchas por el poder es ejemplificada en el amplio análisis de Roy Lubit, de los casos de 2 tops executives, que a causa de sus malas artes, estuvieron a punto de despeñar a sus empresas http://www.rae.com.br/artigos/1480.pdf . No deja de llamar la atención sin embargo, que las terapias recomendadas por las altas escuelas de ejecutivos para reencausar estos casos, transiten por caminos utópicos, muy alejadas de lo que verdaderamente es la naturaleza humana.

Bibliografia.1-Maquiavello, Nicolás. 1984. El Príncipe.2da Edición.Editorial Plus Ultra Buenos Aires.