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Thursday, July 07, 2005

Londres : En torno a la agresión.


En el Perú, fuimos hasta hace poco víctimas continuas de los ataques terroristas de Sendero Luminoso, los mismos que terminarían abruptamente, durante el gobierno de Fujimori. De esa época (1980-1993), recordamos ataques casi a diario, a blancos civiles y militares. Las cosas llegaron a tal extremo, que en un momento determinado, los peruanos empezamos a acostumbrarnos al estallido (por doquier), de bombas asesinas. Aunque nos perturbaba en extremo, nos acomodamos a los intempestivos cortes de agua, luz, teléfono,TV, etc., por dias, semanas...meses. Como no se podia escapar y habia que vivir, muchos llegaron a transitar sin miedo, sin miramientos, por potenciales áreas de blancos terroristas, no obstante que cualquier calle podia ser el escenario del estallido de una carga de dinamita, ocultada arteramente. Un maletin, una caja de zapatos, una pelota, una bolsa al interior de un un tacho de basura, cualquier paquete podia estar guareciendo un explosivo.
La muerte podia sorprenderte en la puerta de tu casa despidiéndote de tu hijos,viajando tranquilamente en un bús, o, simplemente caminando. Al voltear la esquina, alguien que no conocias, te volaba los sesos, sin miramientos. Siendo súbitos los ataques y asesinatos, llegaron a tornar inciertos nuestros destinos. Son de estas épocas, las migraciones más numerosas de peruanos al exterior, de las que se tenga noticia. En sus intentos de sembrar miedo y terror, los insurgentes no reparaban en metodologías. La reconstrucción corporal post -mortem de Maria Elena Moyano, una dirigente y luchadora social, fué casi imposible, luego de ser volada en pedazos, con cargas de dinamita. Asi fué en el Perú, asi fué en las Torres Gemelas de New York, asi fué en Madrid, asi es hoy, en Londres.

Siendo universal, el terrorismo hunde raices en la innata agresión (daño intencionado, a otro), que la mayoria de seres humanos porta consigo. Debe ser asi porque desde que emergieron los primeros hominidos (4,5 millones de años), hasta hoy, el hombre y sus ancestros tuvieron que cazar, para sobrevivir. Esta actividad, tan animal, ha dejado sus marcas en las áreas subcorticales, el hipotálamo y las amigdalas de nuestro cerebro. Es solo desde hace 10 000 años, con la introducción de la agricultura, que es posible, aspirar a nuevos direccionamientos conductuales-culturales. Para decirlo de otro modo, toda sociedad alberga agresores (potenciales terroristas), en su interior.
Aunque ahora ya no cazamos, la agresión sigue instalándose, por condicionamientos operantes y/o reforzamientos positivos : viviendo con padres violentos, por inadecuados desplazamientos de nuestros egos al mundo (incluye odio a personas) exterior, por traumas excesivos condicionados por la pobreza, por falta de amor, por visualización de películas y videos violentos, por idealización de conductas machistas, por inconductas contra minorias, por imposición de fundamentalismos recalcitrantes, por situaciones estresantes (tránsito en Lima, en horas punta), o por la emergencia de fuerzas tanáticas humanas, inherentes. Si a la agresión se le adiciona efectos gratificantes, entonces ya tenemos asaltantes, asesinos, terroristas.

Cuando la guerrrilla finalmente fué derrotada en el Perú (1992), quedaron muchas heridas, muchas reflexiones, varias interrogantes y tal véz algunas lecciones. En un primer momento, nuestro ejército enfrentó frontalmente a la guerrilla, con resultados desfavorables, costos elevados, muchas muertes y exageradas violaciones a los derechos humanos de indefensos civiles. La guerrilla, contrariamente invertia minimamente. Se apertrechaba con las armas de sus victimas, reclutaba jóvenes púberes del campesinado bajo amenazas, sometiéndolos luego a dogmáticos lavados cerebrales. Accionaban al amparo de las sombras. Su táctica de atacar de improviso, ocultándose de inmediato, funcionó. No se sabia si su lider Abimael Guzmán estaba vivo o muerto. El imperio del terror era dirigido desde la oscuridad. En un momento determinado, las victimas :la gente común, mostróse deseosa de transar a cualquier precio, a fin de evitar la quiebra del pais.

La guerra terminaria con un cambio de táctica : la priorización de los servicios de inteligencia, elementos de seguridad trabajando como hormigas,recogiendo información técnica paso a paso (trabajando también en forma no visible). Cuando el núcleo terrorista asomó, se asestó el golpe (captura de A.Guzman y colaboradores más cercanos). Descabezada, la organización, cesaron casi de inmediato sus acciones. Resultó que a despecho de sus espectaculares acciones, el núcleo terrorista era reducido y...casi irremplazable. Capturados, los lideres fueron confinados a cárceles de máxima seguridad. En un primer momento los terroristas, trataron de convertir las cárceles en aulas de adoctrinamiento. Luego, a efectos de conatos, motines y revueltas, muchos de ellos, fueron pereciendo. Después, los minimizados lideres, empezaron a negociar su lucha a cambio de facilidades al interior de los penales.

Cuando el principe le pregunta a Maquiavelo, si para manejar el imperio es mejor ser malo o bueno, este le aconseja ser malo, arguyendo que los hombres lo apoyarán solo mientras los favorezca. Caso contrario, no vacilaran en darle la espalda. Para Maquiavelo, la debilidad o blandura no es buena, porque propicia levantamientos y motines. Bush siguió este consejo cuando se embarcó en las guerras contra Agfanistán e Irak. La contundencia conque realizó estos ataques, también parecen tener su origen en la teoria de los juegos que arguye que al enemigo hay que golpearlo continuamente, con contundencia, para anular su capacidad de respuesta y conspiración.
Queda por ver si esta lógica es correcta, porque lo sucedido hoy en Londres, insta a examinar otras opciones. Siempre es aconsejable conocer a fondo al enemigo, averiguar que quieren (retiro de tropas americanas e inglesas de Irak y Agfanistán), ver que es lo que se puede negociar o conceder (España se retiró de Irak). Tratar de lograr que las dos partes ganen, ceder donde sea necesario. Impedir que los intereses económicos particulares de ciertos grupos primen, so pena de que una mala negociación crispe los ánimos, convoque extremismos y se tenga que lamentar más tarde consecuencias funestas, incluidos los ataques nucleares (de ambos lados).

A la negociación se deben añadir gestos. Condonar la deuda externa a Africa y otros paises pobres , seria importante. Combatir las enfermedades diezmadoras de continentes, también. El no apoyo a regimenes corruptos, la aceleración de la retirada de Irak y Agfanistan, que Europa integre a los turcos y paises del este, es importante. No es conveniente oponer al fundamentalismo religioso arabe, otros fundamentalismos de corte occidental. Muchas cosas se arreglan en el camino, con buena voluntad. Lo que no nos exime de reconocer a ciertos fundamentalistas irrecuperables. A ellos hay que aplicarles todo el peso de la ley. En resumen: oponer a todo ataque terrorista, una respuesta militar inmediata, altamente selectiva (no arrasando paises), priorizar la coordinación de una sofisticada red de inteligencia (mundial), antiterrorista, priorizar la captura de los líderes y, negociar donde sea conveniente, adicionándole gestos concretos.

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